Ventanas.
Ventanas. ¿Miramos, vemos u observamos? ¿Prestamos atención a lo que perciben nuestros sentidos? o ¿Solamente nos guiamos por lo que tendríamos que ver, ahora mismo a través de nuestras ventanas?. Ventanas para aplaudir, ventanas indiscretas, ventanas al sol, la luna, las estrellas, para sentir la lluvia y escuchar a los pájaros, sobre todo ahora que nos deshicimos de nuestro ruido y contaminación. Para dejar entrar el aire en nuestras vidas y una cantidad enorme de información a través de nuestros ojos y nuestra mente. Algunos miran por una ventana a la que llaman “la tele”, otros por “el móvil”, por «el ordenador» y dentro de estas ventanas, por mas ventanas, las que emergen en forma de redes sociales, vídeos, etc. Porque utilicemos “Windows” o no, creo que pilláis el concepto, o eso espero 😋.
Miramos, vemos y observamos o seguimos viviendo nuestro día a día incluso con más velocidad y falta de fé en nosotros mismos que antes de todo esto. Miráis en vuestro interior para conoceros a vosotros mismos o solo esperáis a que nos quiten la escayola para dejar de mirar indiscretamente… o bueno, seguir haciéndolo.
Cada vez siento más que estamos todos dentro de la caverna, curiosa anécdota que el ser humano saliese de ella, fue libre y luego gracias a las increíbles innovaciones que logró, comenzamos a ver todos de nuevo la vida a través de las sombras del fuego o en este caso, a través de datos que flotan como pavesa, en algún punto de un cielo con estrellas en forma de ceros y unos.
Lo que me recuerda a una conversación con un buen amigo sobre la perdida de la cultura, los extremeños no tendríamos que ser ceniza en el aire, aunque sea de brasero de picón, en todo caso tendríamos que ser la imagen congelada de ese picón siempre ardiendo y con una pavesa real inundando la red.
Deberíamos de observarnos y no solo mirarnos al espejo, ni de hacerlo por las ventanas, deberíamos ser conscientes de quien somos y en qué momento, la cultura de ser nosotros mismos y no quién nos dijeron que seamos, no vender humo, si no picón ardiendo, sin filtros de instagram (aunque a todos nos gusten) 😅.
Quizás ahora, todos tengamos tiempo de experimentar y conocernos a nosotros mismos y a nuestras ideas y valorarlas por encima de las ideas que nos quieren vender otros, de ser auténticos. No sé si esto es una reflexión y ni siquiera sé si tiene sentido, pero hoy me han venido a la mente estos autorretratos (podéis llamarlos selfies), de abril de 2014, en un momento de experimentación personal, de esos que creo que te ayudan a definirte.
Cuando he pensado en subirlos, me han venido a la mente palabras que solamente he dejado que fluyan por mis dedos, como agüita de mayo, gracias que no he dejado he teclado mojado, ya que, entonces, igual, tendría que dejar de estar enganchada como todos, por simplemente motivos técnicos 😋.
Espero que estéis todos bien y que disfrutéis de estas «viejas» fotos 🤗.